REENCUENTROS

Hace varias jornadas, ya bastantes escribí, creo que un par de artículos relacionados con una conversación que dos mujeres desconocidas para mí, y próximas a mi mesa-escritorio mantenían en torno a una intervención quirúrgica a la que una de ella se iba a someter. Era algo así como la extirpación de un mioma, lo que conllevaba arrastrar también ovarios y otras actuaciones anexas al asunto. Yo, poco dado a intromisiones, no recuerdo si fue el segundo día cuando tuve el atrevimiento, al volver a escuchar que la conversación iba por el mismo camino y con el buen espíritu de animar, expliqué que yo había pasado por quirófano para tema grave cardiológico y gracias a la buena técnica ahí estaba dando guerra.

Hoy. al cabo de dos meses mas o menos, me he encontrado con la hermana de la afectada, ella tampoco me ha reconocido. Y yo que no soy muy buen fisonomista me ha colaborado que estaba, igualmente, en la mesa de al lado con una amiga y por la conversación me he dado cuenta que se trataba de la persona que yo pensaba. He observado cierta tristeza en la explicación porque al parecer mañana le someten a diversas pruebas de contrastes renales para volver a repetir otro tipo de intervención derivada al parecer de un mal enfoque de la primera y al parecer surgieron más complicaciones de las que habían previsto y la persona ha quedado convaleciente y sometida a controles y tratamientos diversos. En fin son estos tipos de noticias que afligen porque, aún sin conocer a la persona, te provoca angustia el mal de los demás. ¿Sabré algún día la conclusión de este problema?. No lo digo por curiosidad, lo único que le deseo son mis parabienes.