Blogia
ofloda

EL PRESIDENTE POR EDURNE URIARTE ABC - 26/11/07

EL PRESIDENTE  POR EDURNE URIARTE ABC - 26/11/07 Según mi costumbre me gusta incluir el artículo del periodista, en este caso la periodista, para que luego el lector sepa con mejor conocimiento de que va mi comentario: No es casualidad que Suso de Toro comience su libro sobre Zapatero con el capítulo «Un español optimista». Es su principal activo y lo ponen en valor sus aduladores, sus asesores y él mismo. El propio Zapatero relata en ese capítulo que era tan alegre y optimista de niño que un tío suyo le puso el apodo de «Alegrías». Y que no ha cambiado, que sigue siendo igual de positivo. Frente al estereotipo del español cabreado, hipercrítico y amargo, él, dice, es atípico. Es un optimista.Sus publicistas coinciden con el escritor y con el propio Zapatero, y por eso le han diseñado el eslogan «La mirada positiva» para envolver desde ahora la campaña socialista. Tienen razón, es la mejor arma electoral de Zapatero. Sobre todo, realza el contraste con un Rajoy de semblante serio, pesimista y triste. En menor medida, pero también contribuye al mensaje de una España crispada y negativa que es la del pasado, la del franquismo, la del PP, la de Rajoy; y otra España feliz y positiva que es la del futuro, la de la izquierda, la del PSOE, la de Zapatero. Y, en tercer lugar, alimenta una percepción de triunfo y la imagen de un Zapatero ganador y de un Rajoy perdedor.Claro, que el arma es de doble filo. El optimismo congénito de aquel niño apodado «Alegrías» ha sido también la fuente de los principales errores del adulto. Y una excesiva apelación al concepto pone de relieve algunas de sus consecuencias en su aplicación a la gestión de gobierno. Sobre todo, la negociación con ETA. La aciaga frase de la víspera del atentado de la T-4 fue el símbolo del fracaso de un optimista, del niño-adulto feliz que construyó la esperanza del fin de ETA sobre la nada, sobre su propia personalidad. El optimismo con el conflicto nacionalista ha tenido frutos parecidos. Y en cuanto a la «marcha espectacular de la economía», anunciada el verano, los expertos ya le llaman «Alegrías», con intenciones menos bondadosas que su tío. Se trata, por tanto, de que «la mirada positiva» se dirija exclusivamente al futuro. Como se vuelva, podría descubrir el optimismo de un insensato. O enfrentarse a la pregunta de algún paisano: «y usted, ¿de qué se ríe?». Mi comentario: <<Acertadísima como siempre Edurne, en breves palabras recoges la ‘alegría y estulta sonrisa’ del Sr. Rodríguez, ambas son proporcionales a sus continuos errores de él o de los miembros de su gobierno, cuantos más errores comenten y de mayor calibre, más se ríe. Este remedo de Mr.Bean español, pero sin gracia alguna y si con la trascendencia de sus continuos traspiés, tiene la suerte de tener una masa de seguidores que le siguen las gracias y todo es gracias ‘a la memoria histórica’, luego fueron falsos cuando tanto aplaudieron a la Constitución del 78, no había estrechamiento de lazos, era mentira, los resentimientos estaba aflorados y aquella falsa canción de ‘Libertad sin ira...’. Todo una patraña del estilo que nos tienen acostumbrados nuestros ‘ cultos progres ‘ que están anclados en el pasado y en el odio.Yo creo que fui uno de los primeros paisanos que se dijo << ¿ de qué se ríe? >>, claro más contundente, añadí <<ese gilipollas>>. Creo que remata muy bien la frase. Lástima no tener tu correo Edurne, pero entiendo que en vuestra profesión no podéis prodigar mucho ciertos datos, os abrumaríamos aunque fuera para bien. Enhorabuena por todos tus comentarios.

0 comentarios