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TRABAJO ACTIVO Y JUBILACIÓN

TRABAJO ACTIVO Y JUBILACIÓN

Tenemos, lógicamente, más experiencia laboral vivida los jubilados por dos razones bien explícitas, prioritariamente porque hemos andado por ambos caminos y como dijo el poeta Antonio Machado, ‘ se hace camino al andar ‘ y en segundo lugar por la vivencia que dan los años, aunque todos los días se aprende algo y es por ello que aunque se diga que el saber no ocupa lugar, si va rellenando el magín de conocimientos más o menos valiosos. Aunque no quiere decir que seas más sabio, ello depende de cómo hayas aprovechado la vida y en que.

Empezaré por decir que yo entre mi prejubilación que se inició muy prematura y la jubilación llevo 9 años sin trabajar. Ello me ha permitido mayor explayación de mi tiempo libre; eché mis números y vi que ellos me permitían pasar 15 días en, como yo le llamo, mi Hotel de Torremolinos, La Barracuda, primera línea de playa de 3 estrellas pero muy buena atención y habitaciones con tv y aire acondicionado y unas vistas maravillosas al mar, ya digo no lujos, pero relación calidad, precio, lo suficiente para una buena estancia. Así que hago las 4 estaciones como Antonio Vivaldi, Primera, Verano, Otoño e Invierno.

Aunque mi vida allí, al igual que en Madrid, sea monótona yo disfruto así.

De muy joven fui muy tímido, introvertido y buen estudiante, de lo que saqué conclusiones, una cultura mediana pero suficiente para el devenir diario y poder nadar en las aguas turbulentas de la vida, de la  crítica censurable o elogiosa, de la ironía, del buen entender. Luego por profesión la timidez se fue diluyendo, ya que mi puesto de dirección de sucursal bancaria durante veintitantos años me hizo reconvertirme, terminando siendo algo parlanchín. Bien pues volviendo al mundo de la cierta permisión que me proporcionan mi tiempo libre, el descanso del guerrero, tras 45 años de sagrada cotización a las arcas del estado. Esas 4 estaciones comentadas me han permitido conocer a una población variopinta, en donde mis modestos conocimientos de inglés, francés e italiano, me han servido para relacionarme con personas de muy diferentes países, ya que, sobre todo, el inglés te permite el trato de personas de muchos países que conocen esta lengua. He tratado con mujeres guapas, feas, agradables, etc pero tratos verbales, nunca pretendí que el eterno amor platónico que llevo dentro de mí, fuera más allá...

 

 

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