APARICIÓN OTOÑAL

Bueno tengo las vacaciones o salidas fuera de mi habitual entorno como las Cuatro Estaciones de Vivaldi, Primavera, Verano, Otoño e Invierno. Ahora, lógicamente, le ha correspondido al Otoño, me ausenté el día 3 con idea de retorno para el 18, pero por antigüedad, el hotel. Desde hace unos 3 años, nos otorga un bonus y hemos permanecido hasta el día 23. Las dos semanas contratadas por mi fueron de una climatología semiveraniega, estupenda, el sol radiante, pero soportable, te permite, mejores movimientos, sin el agobio de un calor angustioso. El ‘bonus’ referido se portó peor, excepto un día aceptable, el resto de los días fueron grises y alguna lluvia aunque no fuerte, no obstante, yo paseé en bañador y camiseta y me di mis baños de mar y piscina. El agua malagueña es fría, quien la conozca sabe de lo que hablo, la corriente proveniente del Atlántico le da esas características, pero aunque no sé nada no me arredra el chapotear como un pato por esas frialdades acuosas. En resumen este ‘descanso del guerrero’ que me he adjudicado ha resultado grato, no tanto por diversión, sino como cambio de aire y relajante, a mí el vaivén de las olas me insufla un ambiente de tranquilidad maravillosa y que nos fuera por algunas añoranzas la estancia sería completamente grata. He estado bastante ‘vago’, últimamente me siento cansando, incluso en este de la escritura que tanto me gusta me está costando reiniciarme, la prueba es que hace 5 días que vine, el artículo lo escribí el 25 y la primera publicación va el 28. No creo, no obstante que mis lectores/as, se hayan rasgado las vestiduras por la ausencia de mis comentarios.

Así que de nuevo me presento a dar la tabarra hasta el 27 o 28 de diciembre que repita, en este caso con las vacaciones de ese Invierno.

Espero encontrar algunos ojos que se posen sobre estos aficionados comentarios.