Blogia
ofloda

TECNOLOGÍAS

TECNOLOGÍAS Estamos en un proceso de aceleración rayano en lo angustioso. La electrónica, la bioquímica y, para no extenderme en terminologías de todo tipo, digo todo, en general, ‘evoluciona’ con precipitación. Esa misma premura, agobia, y no da alternativa para sacar un mejor partido a los avances y disfrutar de ellos, con calma, por algún tiempo.
Yo no estoy en contra de los progresos, pero tanta angustia resulta sofocante. Casi ni te deja disfrutar de lo recién adquirido; todo se queda, vamos casi se queda obsoleto en su propia gestación. Te compras un ordenador, en sustitución de ese que tenía de hace 4 o 5 años y que aunque funciona, normalmente, bien no puede con programas que están creados para equipos de mayor capacidad. Compré hace poco más de un año un equipo con procesador Intel 4-512 MB y 160GB de disco duro, aquello encima de rápido me parecía inagotable. Bien pues hace unos días me sale un cartel que dice ‘no tiene espacio suficiente en disco para esto o lo otro, borre programas que no utilice’. Me quedé perplejo, me parecía mentira. Entro a observar en Propiedades la ocupación y efectivamente, lo tenía cubierto, a base de programas, bajarme canciones y películas, poco a poco lo había saturado. He iniciado un proceso de ir borrando cosas que no me interesaban, estoy sacando en CD’S películas y canciones, he despejado un poco pero, aún así hasta ahora lo tengo un poco inflado.

Entonces me pregunto, acaban de instalarme hoy un ‘TDT’ (televisión digital terrestre). Como es de primera generación me imagino que los 90€ que he pagado por ello, darán poco de sí y no tardando mucho tendré que actualizarme. Había un tramo de una zarzuela (opereta española de los siglos XIX y primeros del XX, principalmente) en el que uno de los figurantes decía “Es que los tiempos adelantan que es una barbaridad...”

¿Qué diría hoy?.

El tema da para más seguiremos tratando.

IMAGEN: APARATO TDT

0 comentarios