Blogia
ofloda

IDIOMAS

IDIOMAS Siempre he tenido la curiosidad de adentrarme en el mundo de las letras y conocer vocabulario de otros idiomas, sobre todo, de los que más rodean mi entorno del país donde vivo. Otra cosa y la pena es que llegar a conocer otro idioma para poder dialogar un poco y no digamos entender a otros es enormemente complicado. Saber algo de gramática, conocer cierto vocabulario es bueno pero no soluciona las conversaciones. Claro mejor es saber algo que nada.
El conocimiento y aprendizaje de un idioma no se hace habitualmente a través del estudio. El estudio es un complemento para mejorar la calidad, cuando ya sé sabe.  El idioma se aprende a través de la práctica de lenguaje continuada, la repetición de frases, giros y expresiones y que la persona que platica contigo, una y otra vez te corrija, la forma de dicción y expresión. El ejemplo más natural y sencillo es el de los niños pequeñitos, no saben leer, ni escribir y solo con oír una y otra vez decirles lo mismo, ellos terminan repitiendo y al final llegan a la comprensión de lo que dicen. Por eso a los peques es conveniente darles mucha conversación para que ellos vayan almacenando en su cabecita los conceptos y las informaciones que luego él a base de repetir aprende. Por supuesto que durante mucho tiempo dicen cosas mal, pero corrigiéndolos y haciéndoles repetir terminan aglutinando. No digamos si al niño se le alienta a entender las primeras letras y toma entre sus manos un cuadernillo o librillo en donde con dibujos se expresan actos. Estos son la puerta de los libros como literatura, si el niño ‘cae en ese pozo con ilusión’, pronto tendremos un buen conversador y aficionado a disfrutar de los placeres que representar unas letras y palabras bien integradas.
Cuando tratas de aprender algo de un idioma, lo primero que te sueltan son reglas gramaticales, estudio de formas de verbos, memorizar vocabularios inconexos y claro como al pensar lo haces en tu lengua materna, el ordenador que hay en el cerebro tiene que traducir corriendo y claro como las construcciones idiomáticas difieren en cada lengua, pues lo que llegas a decir, aunque sea entendible, no es la manera correcta de su exposición, pero algo es algo. Yo con mi afición a este tema, soy capaz de expresarme. Algo, un poquito, en inglés, francés o italiano, con las personas que intercambio estos modestos comentarios me dicen que me entienden perfectamente y que tengo una buena pronunciación. Mi cruz está en cuando ellos me hablan en su idioma, si tengo la suerte de hacerles comprender que me hablen despacio y utilizando palabras sencillas llego a captar algo, sino es un suplicio, además al ser épocas de tiempo muy limitadas.

0 comentarios