Blogia
ofloda

VIDA COTIDIANA

VIDA COTIDIANA Cuando se produce alguna alteración o interrupción en el devenir cotidiano., es preciso volver a enhebrar la aguja para continuar con las puntadas precisas en el tejido que, poco a poco, vamos elaborando en el taller de nuestra vida.
Mis interrupciones en esa ‘confección’ casi forman parte de adornos, geométricamente, dispuestos, dado que son repetitivos en temporadas casi equidistantes pero, casi sin darte cuenta, te hacen variar la forma en la trama y la urdimbre de esa elaboración de ese lienzo de elaboración habitual. Al regreso de pasar unos días fuera de tu casa habitual, obviando las celebraciones, ya he tocado demasiado ese tema, es necesario volver a situarte en las actitudes habituales. En uno de mis recientes escritos habituales he saludado el nuevo año y hoy sin mas pretensiones pretendo ubicarme en mi sitio acostumbrado.
He repasado la prensa a través de internet, he comprobado y leído correos por supuesto unos más interesantes que otros ya que ese spam, más o menos autorizado que tengo, agobia a veces con tanta publicidad innecesaria, pero claro algunos son noticiables de temas económicos, otros culturales, por eso digo dependiendo del origen. Debía gestionar una reparación de mi aparatito reproductor de música MP3 al que se le ha producido un bloqueo y he acudido a la tienda. Me sentido muy incomodado, porque es una establecimiento donde ya mi propia madre compraba desde hace unos 40 años y yo he sido habitual en la adquisición de los electrodomésticos de mi casa y encima hasta con cierto desaire me dicen que, haciéndome un favor, lo mandarán al servicio técnico que está en Barcelona y claro por esta situación tardará un tiempo en ser devuelto. Yo iba pensando en un simple cambio, puesto que el aparato que no ha sufrido percance alguno y con un máximo de 60 horas de duración no es lógico. No pretendo ser agresivo, pero tengo mi genio, y estos detalles de poca atención a un antiguo cliente no son correctos, yo esperaba un simple cambio de aparato en la misma tienda y ellos ya resolverían con su proveedor, pues no señor, me encuentro con ese desplante. Mi tono de voz mas bien alto se ha hecho notar en la queja y por supuesto he resaltado su mala atención, muy prestos a la venta pero poco resolutivos ante el problema. Ha intervenido el responsable y me ha dicho que solicitará le envíen un aparato nuevo, pero estoy por asegurar que alguno de estos lo tendrían en su propio almacén, pero claro para no dar su brazo a torcer, hacen como que me van a tramitar la solución más idónea. Se podrá decir que soy desabrido pero creo que a nadie le gusta le tomen el pelo. Voy siendo mayorcito y he sido toda mi vida comercial y para mí la prioridad ha sido el cliente, sobre todo si tiene razón, claro está.
Bien pues después de estos detalles de cada día me quedaba la parte mas dura y esta era la visita vespertina a la residencia a ver a mi madre. Me llevé una gran sorpresa inicial. A cierta distancia, aunque no sabía, realmente quien era, sonrió como conociendo a alguien que le iba a acompañar. Pero luego según avanza la estancia con ella te das cuenta que ha sido como una falsa alarma, no hay posibilidad de conciliar una conversación, nada recuerda, pero lo terrible ha sido que al ir a despedirme, a toda costa se quería venir conmigo. He necesitado colaboración de una señorita asistente para convencerle de la imposibilidad de su pretensión. Total un día un tanto amargo con un final bastante triste.

0 comentarios